Contras del colecho: las caídas

Muchas veces he defendido, desde mi punto de vista y comodidad, el colecho, declarando por ejemplo que en mi cama somos 4.

Me encanta que las niñas duerman con nosotros, y que se duerman abrazadas a mi (aunque a la mayor la pasamos después a su cama que está junto a la nuestra)

Me encanta no tener que ir hasta otra habitación las 20 veces que la mayor sueña, se revuelve, se queja. Ahora la oigo de fondo, pero sigo durmiendo.

Me encanta que el fin de semana me despierten ellas, con mimos. Encuentro que es el mejor despertar del mundo. El domingo la peque me despertó acariciándome y hablándome en susurros (eran las 7 am eso si…) «mami, ¿es de día? ¿estás despierta? ¡ya dormí!» Intenté no hacerle caso pero al final intentó abrirme los párpados con los dedos…y me rendí. Estuvimos jugando un rato en susurros para no despertar a nadie, pero visto que no tenía intención de dormirse (a veces lo consigo) me la llevé a jugar a otra parte. ¿hay mejor despertar que éste? ¿A pesar del madrugón? Yo creo que no.

Pero me estoy desviando del tema. Ya os contaba aquí los pros del colecho cuando no son bebés. El tema de hoy no son las ventajas o bondades del colecho. Son las desventajas. En casa, una vez controlada la operación pañal nocturno colechando, nos queda una desventaja, un contra en mayúsculas. Y no, aviso que no me refiero a tener la cama para nosotros solos y utilizarla para aquello que su supone usan las camas las parejas, además de dormir.

Nuestro gran contra son las caídas. Nuestra cama es grande, pero también muy alta. Aquí en Chile se usa la cama tipo boxspring. Para que os hagáis una idea, mi cama me llega a mi al muslo (mido 1.68) Para las niñas, ha sido todo un aprendizaje aprender a subirse y a bajarse. Pero, donde más hemos sufrido, es con las caídas.

Compramos la cama cuando estaba por nacer la pequeña, así que la mayor ya estaba grandecita y con algunas peripecias aprendió a subir y bajar. Además, como es precavida, controló mucho como hacerlo antes de intentarlo sola. Pero se ha caído un par de veces dormida, porque sueña mucho y se mueve aun más. Y si se ha caído solo un par de veces es porque la hemos tenido que mover mil veces y ponerle barreras de almohada por montones. Por suerte, siempre ha caído bien y ha sido más el susto que otra cosa. Lo sabemos porque a su edad ya nos cuenta donde se ha hecho daño.

Pero la pequeña es harina de otro costal. Ella desde los 6 meses duerme ahí con nosotros (sí, yo debo ser de las raras que parte el colecho con el bebé de seis meses ya…) y se ha caído infinidad de veces (no estoy orgullosa, al contrario; pero es solo hecho). Mis despertares nocturnos más bruscos. Porque siempre me despertaba un segundo antes del golpe. Y nunca sabíamos si se había dado en la cabeza o no, así que me costaba mucho pegar ojo el resto de la noche.

Eso sí, nunca le ha salido ni un chichón ni moretón ni nada de nada. Para mi que es como los gatos y pone las manos antes de caer. No lo sé.

Lo primero que hicimos fue no dejarla dormir en medio. Porque no nos dábamos cuenta nunca de como se movía, pero la pillábamos cada noche a los pies. Y con la segunda caída ya quedamos con un cargo de conciencia que no nos lo quitaba nadie. Pero da igual que tengamos una barrera en el lado donde ella duerme. Que además abajo hagamos una montaña de cojines. Ella pasa por debajo, o por arriba. silenciosa, sin patadas ni quejidos como su hermana. Y no pronuncia sonido hasta que se cae! He pensado tantas veces si venderían cascos como este para dormir!

imagen de internet

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Y no es solo porque de bebé fuera más difícil darse cuenta que se movía! Hace unos días, y de ahí que esté escribiendo este post, a media noche tuve la sensación que no podía mover el pie. Y suerte que, en vez de pegar una zancada al aire, tuve un 7° sentido y me levanté. Porque era ella!! Que había bajado hasta los pies, pasado por encima de mis piernas, y estaba a media vuelta de caerse al suelo!!! Mis despertares nocturnos no son muy tranquilos como veis.

La vez anterior la oí quejarse en la profundidad de mis sueños, y se estaba cayendo, de cabeza, por el diminuto espacio de un palmo y medio que hay entre la baranda de seguridad y la pared…la pille del pie, al vuelo. aun no se cómo! ¿que cómo lo hace para caerse en un espacio tan pequeño? no lo sé. Pero no ganamos para tanto susto!!!

Y ni os cuento lo de saltar en la cama. Tuvimos que prohibirlo, o mejor dicho exigirles que tenía que ser supervisado, porque era un juego de reflejos pillarlas cuando, en un paso (o salto) en falso, se caían de la cama. Aun no sé como no se han roto algo!!!

Y lo confieso, cada vez que en estos tres años alguien me ha dicho que la pequeña terremoto iba «detrás de lo normal» en lenguaje o desarrollo, siempre una vocecita en mi subconsciente dice «seguro que es por las caídas! tu culpa! mala madre!»

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21 comentarios en “Contras del colecho: las caídas

  1. Al leeros me siento un poco mejor porque me sentía tan mal por las veces que se me a caído mi bebe… con esta ya van cuatro. Al principio nunca se me descuidaba ni un momento ni siquiera durmiendo porque una duerme con un ojo abierto y otro cerrado pero ya con 9 meses la cosa cambió. Aprendió a gatear y oye ya van cuatro… estoy muerta de pena, los ojos hinchados de llorar y sin pegar ojo del miedo porque la última acaba de ser ahora mismo y a llorado tanto… me siento súper mala madre…

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  4. ¡Hola! Nada de «mala madre», son gajes del oficio. Confieso que con mis hijos de vez en cuando seguimos haciendo colecho (aunque ya no son bebés) y el que se ha caído ¡Es mi marido! Eso sí, que como son unos monstruos de más de un metro, mi marido y yo despertamos hechos polvo, pero como bien comentas, es hermoso el despertar con los críos al lado tuyo. Besos.

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  5. Pues si que son altas las camas allí!! Los mios también se han caído alguna vez pero incluso sin colechar y con barrera. Cuando los teniamos en la nuestra los poníamos en medio de los dos. Y lo de saltar en la cama… Me has recordado una vez que estabamos en un hotel con las niñas super alborotadas con lo que propuse ir a dormir pronto!! Ay madre mi mediana con 18 meses allí que se puso a saltar en la cama, cayo al suelo y acabamos en urgencias, aunque la cosa no fue más allá de un par de puntos en la frente.. Pero menudo susto!!

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  6. Nosotros lo solucionamos con la cuna pegada a la cama sin barrera, ella duerme en la cuna… bueno, cuando quiere… si repta a la cama para tomar pecho y se queda dormida en la cama, pues nada… pero tiene la cuna a un lado y a nosotros dos al otro lado, así que es difícil que se caiga. A veces se ha ido a los pies de la cama, pero pocas, creo recordar que sólo se cayó una vez de la cama.

    Por cierto, me has hecho pensar en la palabra «moretón», es la que escucho a mi mujer y mi familia chilena, pero mi familia madrileña dice «moratón» y he ido a buscarlo. Según la rAE

    moretón. ‘Cardenal (moradura de la piel)’. Esta es la forma originaria y la única usada en el español de América: «Le tocó a ella ponerle emplastos en los moretones» (Allende Eva [Chile 1987]); en España, moretón, forma preferida en zonas como Andalucía, Canarias o Cataluña, alterna con moratón, mayoritaria en el habla culta del centro peninsular: «El paso del tiempo iba borrando de los pechos las marcas de los mordiscos y los moretones» (Mendoza Ciudad [Esp. 1986]); «Tiene un moratón en la frente» (Merino Choz [Esp. 1987]).

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    • creeme que si ves como tenemos la cama alucinarías que se caiga. Tiene la cama de su hermana, una barrera, y a nosotros…y ella busca el rincón más inverosimil para caerse. Cada vez menos, pero cada vez con más arte. Lo de los moretones…será que al ser catalana para mi siempre ha sido moretón 🙂

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    • Si. Nosotros hicimos lo mismo. Osea. No poner el colchon de la cama porque no se puede desmontar pero si ponerle uno para amortiguar. Pero si un dia nos olvidabamos de ponerlo…alli iba ella. O si te dejabas un milimetro sin resguardo…pam! Aho se caia. De mas mayor lo sacamos y se sigue cayendo. Y su hermana no se cae nunca!

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    • Creo que me he expresado mal! Yo no encuentro al colecho ningun problema porque hace ya más de 4 años que lo practico y fue mi mejor descubrimiento! Pero solo quería contar que, en mi casa, con una cama muy alta y una hija experta en buscar el hueco para caerse dormida, ese es un contra al que tenemos que estar atentos. saludos!

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