En una tarde cualquiera…con una Invaginación Intestinal

Ayer fue el día de la madre aquí en Chile y debería ser un post sobre el día de la madre (o el día de la madre de la madre, que se merece un monumento ella también) pero al final me he decido por contar una de las cosas que nos pueden pasar como madres, una de esas situaciones inesperadas con niños, hoy voy a contar algo que es muy de madres y de hijos también.

Los niños son imprevisibles, eso lo sabemos. Te das la vuelta dos segundos y ya te la tienen liada. Pero hay veces, que realmente dan a tu mundo la vuelta, como ese fin de semana que pasé de organizar un cumpleaños infantil a un entrar a mi hija en un quirófano. Nada de preocuparse, que la enana está mejor que nunca y la recuperación, como buena terremoto, fue casi más rápida que la operación en sí.

Pero empecemos por el principio. Estábamos celebrando esos maravillosos 3 (lo digo por lo de dejar atrás los terribles 2) de la Enana, que si en el colegio, que si con la familia, que si con sus amigas. Tarde del sábado y está ella saltando en su charco de barro muy DIY pero que a ella le pareció muy Peppa Pig que era lo que contaba (aquí la foto)

Niñas agotadas, domingo de jugar con todo lo nuevo y de celebrar el día de la Palma y nos vamos a dormir agotados pero tras un fin de semana muy aprovechado.

4am. La enana se despierta chillando como si le clavaran un cuchillo (no se donde viene esta expresión ni sé que se siente, pero chillaba de una forma que no creo haberla oído nunca). Visita al baño, cambio de postura…se le pasa…y volvemos. Se dobla entera, se estira, se gira, le saltan las lágrimas,..

Primera impresión: ya estamos con la intoleranica/alergia/comida que me sienta fatal ¿ha comido algo raro? No que sepamos. ¿Muchas chuches? Tampoco…y tampoco sería para tanto. Los chillidos van y vienen, parecen cólicos. Se le pasa, se duerme, y a los 10 minutos otra vez como si no pudiera más. Un poco de apiretal que hace milagros. Pero nada. Pasamos el resto de la noche entre llantos, cambios de postura, y cabezadas.

Amanece, ella que quiere su leche pero no la quiere, los dolores parecen más espaciados pero le siguen saltando las lágrimas cada vez que le duele. Yo (y no soy adivina) le tenía hora en el pediatra para la revisión de los 3 años ese día, pero a última hora de la tarde. Y no sé qué me dio: no sé si fue la forma en que chillaba cuando le dolía, o la zona que se tocaba…pero me pareció que era muy tarde. Llamé y pedí una hora para el pediatra que estuviera disponible a la primera hora posible. Había en 4 horas más, así que pensé que así podíamos evitar ir a urgencias.

Llevamos a terremoto mayor al colegio, la enana se quedó al cuidado de la abuela y yo fui al trabajo casi que a saludar, porque un ratito más tarde volvía para llevarla al médico. Salí del trabajo diciendo «la llevo a consulta y vuelvo» Cuando la recogí no quería ni caminar, y en el camino al médico me di cuenta que, aunque los dolores eran aun más espaciados que antes, parecían ser más intensos.

Y entonces…una entra en al consulta pensando que va a salir con el medicamento de turno que lo cura todo. El pediatra le hace el chequeo, a la enana no le había dado ningún dolor, pero termina…y suelta: es una apendicitis o una invaginación intestinal (WHAAAT???) con mi cara lo dije todo, porque ahí me explicó mejor.

La enana, que se tocaba la parte inferior derecha del abdomen y por eso el dolor no me molaba nada, tenía inflamada la zona al tacto, además reaccionaba con un quejido al palparle la zona. Por como describía yo el dolor que ella mostraba, podía ser una apendicitis poco desarrollada aun (porque sino el dolor no hubiera sido intermitente) o una invaginación intestinal, que consiste (quien no quiera saber más que no siga leyendo) en el intestino doblándose sobre si mismo. El intestino grueso se inflama y atrapa parte del intestino delgado. Esto impide el correcto funcionamiento del intestino (si quieres saber más, Wikipedia) Yo no sabía ni que existía! Pero estaba a punto de familiarizarme más con ella. También me dijo que existía una posibilidad que solo fuera una infección.

Necesitábamos una ecografía urgente para descartar los dos diagnósticos. Así que de la consulta, a rayos. Llámame previsora, pero ya avisé al trabajo que no volvía ese día. En este momento, y sin preguntar nada más, ya tenía claro que de infección nada. El ecógrafo, que sí escuchó los chillidos de la pequeña en un ataque de dolor (él y toda la sala de espera que alucinó con su chillido agudo), nos confirmó que se trataba de una invaginación intestinal. Él estaba contento, porque nos dijo que así evitábamos la cirugía que se requiere en caso de apendicitis.

Pero la invaginación hay que tratarla de forma urgente para liberar la obstrucción intestinal. Así que…a urgencias a esperar consulta con un cirujano pediatra. Lo primero que se hace es una desinvaginación pneumática (introducen aire en el colón esperando que la presión del aire libere el intestino delgado) Funciona en el 90% de los casos. A nosotros no nos funcionó y, ahora que he visto lo que es, es una tortura!!! Sin sedación, sin calmantes, sin nada…el dolor de la prueba lo pude sentir yo a través de la enana, que aunque es de pocas palabras le dijo claramente al doctor «me duele mucho no quiero más por favor»

A mi se me partía el corazón, nunca la había escuchado hablar tan claro; y al parecer a la doctora que le hizo el procedimiento también, porque no siguieron intentando. No había funcionado, pues tenía una invaginación de 8cm y ahora quedaban 4cm. Nos lo confirmó el mismo ecógrafo de antes, a quien se le veía apenado que no se hubiera resuelto sin cirugía. ¿Siguiente paso? De vuelta a urgencias…a esperar habitación.

Dos horas más tarde estábamos ya en la habitación, la enana había jugado un rato con su hermana y no entendía por qué no podrá irse a casa (y su hermana estaba algo nerviosa al verla ahí, retorciéndose de dolor y con una vía en la mano) Desde que habíamos confirmado el diagnóstico no le habían dejado tomar agua. Así que llevaba la pobre unas 5 horas sin beber nada. Ella parecía tranquila, quería sacarse la vía pero una vez pasada la prueba de desinvaginación pneumática, todo le parecía bien. Hasta se dejaba medir el pulso y la temperatura. Le daba igual estar en una cama de hospital mientras la dejaran tranquila.

Quisieron ponerla en una cuna. Era obligatorio para pacientes menores de 5 años. Y me negué. La primera noche que la pequeña duerma en una cama separada de mi no sería una noche en la clínica. Insistieron e incluso tuve que firmar un papel que me hacía responsable si se caía, pero nos dejaron la cama.

Pero cuando su hermana, el padre y la abuela de las criaturas se fueron a casa, ella me miraba, como si quisiera preguntar qué iba a pasar después pero en realizad no quisiera saberlo. Yo le decía que el doctor iba a curarle el dolor y dormiríamos ahí. Recuerdo perfectamente el rato que estuvimos solas, viendo la tele, comentando los dibujos, pero recuerdo sobretodo como ella me miraba a veces fijamente a los ojos,  buscando saber si de verdad todo iba a ir bien. Siempre he pensado que tiene un sexto sentido para esas cosas.

operacion

Cuando nos vinieron a buscar para ir a quirófano, en el camino si que se asustó. Yo la acompañé hasta el pabellón, pero cuando me vió ponerme el gorro y la bata…me miró con autentico terror. Estuve con ella mientras le ponían la anestesia, y vi como peleaba para que no le pusieran la mascarilla…hasta que se quedó dormida. Ver como tu pequeña se queda así, anestesiada y lánguida, es una sensación muy extraña, da mucho nervio…no me gustó nada. Así que pregunté si podía irme y me largué de allí.

1 hora después ya estaba en recuperación y nos dejaron entrar a acompañarla. Dormía profundamente, ya con su intestino curado y sin apéndice (por si las moscas) Supimos que se encontraba bien apenas se despertó y empezó a dar patadas para que le sacaran la vía (que ahora le habían cambiado al pie con la esperanza que no se la quisiera sacar)

Por supuesto pasamos la noche durmiendo ambas en la cama de hospital. Las enfermeras se sorprendían al entrar a darle la medicación, pero agradezco que nadie se metiera ni dijera nada. Ella durmió bien, no pidió ni siquiera el calmante extra que le tenían por si acaso. Estaba aliviada sin el dolor que la había agotado todo el día. La recuperación fue rápida, y si pasamos dos días en el hospital fue solamente porque se negaba a comer la comida que le daban, y sin comer no le podían dar el alta. Cuando le sacaron el suero y siguió sin comer más que galletas y zumo, el cirujano tuvo que convencer a las enfermeras que en casa comería mejor que allí y el miércoles nos dieron por fin el alta.

El alta con indicación de reposo…(aun me rio de eso) reposo del que no hizo ni caso, y el jueves ya corría, el viernes ya saltaba, y el sábado hasta se cayó de la cama por hacer el loco con su hermana. Pero no hemos tenido más síntomas (un 1% de los casos reinciden) y las heridas apenas se le notan.

Este post es mi pequeño homenaje a esta parte de la maternidad, a todas esas experiencias inesperadas y no siempre agradables que nos suceden como madres, y que hacen que el amor por nuestros hijos se haga (si se puede) aun más fuerte. 

¡Feliz semana!

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41 comentarios en “En una tarde cualquiera…con una Invaginación Intestinal

  1. Mi gordita que hoy tiene 9 meses se tuvo que operar de los mismo a los 7 meses,tan bebé y sin su apéndice.Gracias a Dios esta de maravilla hoy en día, pero yo aún temo que vuelva a ocurrir.La pasamos muy mal con mi esposa.Es nuestra única hija y es muy mimada.Una los cuida tanto y pasan estas cosas.El miedo a perderlos y el dolor por verlos sufrir en descomunal.Nunca sufri tanto en mi vida y mi corazón se rompió cuando la tuve que entregar en el quirófano.Solo le pedí a Dios que no mantenga juntas siempre y le prometí a mi hija que voy a estar donde ella esté.Le dije te amo y te espero y si no volvés a mi yo me voy con vos.Porque sos mi vida entera.Mamá siempre va a cuidarte. y lloré , lloré como nunca y comprendí que no hay amor más fuerte que de una madre.Es un amor que te hace pasar todos los obstáculos y te vuelve fuerte por tu retoño.
    Muchas gracias por contar tu experiencia,me sentí muy identificada.
    Saludos desde Buenos Aires Argentina.

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  4. Hola, se perfectamente por lo que has pasado. A mi bebe de 1 añito le operaron hace 3 semanas de una invaginación intestinal. La hora y pico que duró la operación fue la más larga de toda mi vida…Estuvimos unos días en el hospital y a casa con toda la vitalidad de siempre. Es increible como se recuperan!!! Pase el peor día de mi vida viendo su carita de dolor y sufriendo por tener que operarle tan chiquitín. Pero bueno lo importante es que todo salió bien y espero y deseo que no tengamos que volver a pasar nunca por eso.

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  5. Que angustia, querida Lai! recién me entero de esto! una sufre millones con los dolores de las hijas y resulta que al día siguiente corren y saltan como si nada hubiera pasado. Bendita infancia!!! se mejoran tan rápido!! uufff menos mal, jajajaaj
    Feliz día de la madre valiente que eres… un saludito atrasado pero con mucho cariño (después de todo el día de la madre debería ser todo el año, jijijiji)
    Abrazotes!

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  6. pufff vaya experiencia… nosotros estamos saliendo de 25 días de una gastroenteritis interminable, que apuntaba a alergia, intolerancia a la lactosa o celiaquía, pero que al final simplemente quedó en gastroenteritis… y ver a mi peque con úlceras en el culito de la acidez de la diarrea, llorar y temblar de miedo y dolor cada vez que hacía caca, y me pedía que me agachara y lo abrazara… 25 noches pendiente de la pantalla del intercomunicador por si le daban retortijones y tenía que cambiarle el pañal a la 1 o a las 5 de la mañana…
    Qué mal se pasa! Cómo te entiendo y sé por la angustia que debes haber pasado! Menos mal que ya está bien y todo ha quedado ya atrás!

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  7. No le doy me gusta porque que penita he sentido leyendo todo, me alegro mucho que este mejor y con muchas energías

    Y si esas cosas pasan de un día para otro lo importante es la energía positiva que les transmitimos, a mi hija hace 3 semanas por primera vez la internaron por 24 horas porque agarro un virus de vomitos y no comía nada , yo me sentí muy mal así que en tu caso ni me puedo imaginar el sentimiento

    Un abrazo y feliz día de la madre por atrasado

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  8. Jolín menudo susto y qué mal lo debísteis pasar! Pobrecita, le debía doler horrores. Desde luego siempre vale más la pena pecar de exceso que de defecto y si se tienen dudas mejor ir al médico.
    Me alegro que todo haya ido bien y se haya recuperado tan pronto. Un beso!

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    • Gracias!! Eso exactamente pense yo…aunque la llevé a consulta y no a urgencias para que no me enviaran a casa con cara de «la niña tiene colicos y ya se vienen a urgencias» pero el instinto era acertado y estoy encantada de haberla llevado enseguida. Gracias por tu comentario! Besos!

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  9. Lai, pobreta!!!! Trabajo en un hospital, muchas veces en ecos, y mi madre de toda la vida y me duele hasta a mí cuando viene algún peke así muerto de dolor así que imagino lo que pasásteis.
    Menosmal que ya está 100% recuperada la terremoto!!!

    Son de hierro est@s pequeñines/as..

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    • Ai sandra me imagino como debes sufrir. La peque ni lloraba…solo chillaba y se retorcia de dolor…y en la desinvaginacion neumatica pedia porfavor que pararan…me dio tanta pena no poder hacer mas para que se sintiera bien. Pero la suerte es esa…que se recuperan volando!

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  10. Pobrecita, el dolor que pasó durante tantas horas… Y los nervios tuyos como madre, no me los puedo ni imaginar.
    Por suerte nunca hemos entrado en un quirófano, pero con el mayor he sufrido varios ingresos por neumonías y es durísimo verlo apagadillo en una cama tan grande de hospital.
    Me alegro que la peque ya esté recuperada.

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    • Gracias Diana! Ella sufrio ese dia aunque se acuerda poco (se acuerda cuando entra en una consulta medica) yo no se si me dio tiempo de ponerme taaan nerviosa pero me dolia el.estomago de verla retorcerse. Por suerte ya paso todo! Gracias por tu comentario!

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  11. Madre mía, me imagino el mal rato que tuvisteis que pasar… Al menos, por lo que cuentas, supiste mantener la calma, que eso es super importante porque si ellos nos ven nerviosos y preocupados se asustan y es peor.
    Yo si conocía esa dolencia porque la hija de una amiga estuvo al borde de la operación.
    Me alegro de que todo fuera bien y ya este la terremoto recuperada!
    Besos guapa!

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    • Gracias!! Si…fue todo muy rapido y ni pude saber de que iba ni los riesgos…asi que me concentre en que ella estuviera lo mejir dentro de los dolores. 🙂 la verdad es que agradezco que en un dia estuviera todo hecho porqe la pobre lo paso fatal

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  12. Madre mía, vaya mal trago has debido pasar. Yo tuve una obstrucción, no se si será igual pero fue horrible. En una persona tan pequeña tiene que ser angustioso, encima verla y no poder hacer nada por aliviar. Por cierto que suerte que te dejaran la cama, a nosotros no. Y el mio no duerme en cuna y menos solo, les pedí usar la cama de al lado que estaba libre y no me dejaron así que dormimos los dos las tres noches en el sillón de más visitas.
    Espero que este ya mucho mejor y no tengáis más sustos, te mando un beso.

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    • Es parecido a la obstruccion. De hecho en parte es lo mismo porque el intestino no funciona. La verdad es que si que tuve suerte porque los protocolos mandaban cuna y yo me negue de todas todas y consegui que me dejaran asi. No me imagino como debe ser dormir en esos sillones tres dias!! 1beso!

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  13. A mi sobrinita, cuando tenía 3 años le pasó lo mismo y fue muy angustiante. La operaron después de intentar tres enemas a presión , primero con aire y finalmente con agua. Pero volvió a invaginarse las tres veces. Cuando abrieron, tenía el intestino tan inflamado que biopsiaron para descartar que la causa de la invaginación no fuera un tumor. Pero todo salió bien y no ha vuelto a tener problemas nunca más. Eso si, le quedó una cicatriz trofeo que va mostrando a la que puede! ;).

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  14. uufff. Solo de leer me he puesto de los nervios, pero de los nervios al pensar que todo esto me pasara. ¿Cómo reaccionaria? Aixxx, nuestras peques, es que les pasa algo y ya se puede caer el mundo, que nosotras con ellas.
    Saludos y me alegro de que todo fuera bien, de que acabara estupendamente y que la peque se recuperara tan pronto

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  15. Uf qué angustia leyendo todo, no conocía ese problema, es un horror. No quiero ni imaginarme su dolor. Me ha recordado a cuando operaron a mi niño con un mes por una hernia inguinal que le dolía muchísimo y lo mal que lo pasé durante el ayuno, la operación y la noche siguiente. Tenía pesadillas el pobre… ¡Mucho ánimo!

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